Jenifer, estudiante de medicina en su quinto año, probablemente es la tercera doctora Chajulense. Empezó con Filantropis en 2017, Aunque Filantropis tiene otros becarios estudiando para ser doctores, Jenifer es la más adelantada en la carrera. Menciona que el 2019 fue el año más ocupado por sus prácticas en un hospital, en adición a sus estudios normales. Algunas veces sus turnos en el hospital eran largos, terminaba hasta la una de la mañana. Tendrá dos años más de practicas y un año para terminar su tesis antes de que se gradúe. Si decide estudiar una especialidad, lo cual le gustaría hacer si se puede, tendrá cuatro a seis años más de escuela.
La mayoría de los estudiantes universitarios en Chajul solo estudian un día a la semana. En cambio la Universidad Mesoamericana donde asiste Jenifer es plan diario. Esto significa que Jenifer tuvo que mudarse a Xela, a casi cinco horas de Chajul. Afortunadamente, tiene una hermana y dos hermanos estudiando en Xela, así que los cuatro comparten un apartamento. Ella observa que a veces los estudiantes que no son becados pueden tomar su educación como garantizado y a ella le frustra cuando tiene que trabajar en grupo porque los demás no ponen de su parte y afecta su nota. Jenifer se sentía lejos de todo lo que estaba pasando en Chajul. Se siente desconectada de todo en Filantropis y tiene que perder la mayoría de las capacitaciones. El equipo de Filantropis intenta llamar para chequear que las cosas vayan bien. En el 2019, el equipo de Filantropis viaja a Xela para capacitar a los becarios que estudian y viven allá, este 2020 es más fácil porque los talleres es el línea. Filantropis identifica que es necesario ampliar el apoyo que brinda a los becarios que viven en otras áreas de Guatemala para sus estudios.
Jenifer recientemente cumplió una rotación en la sala de emergencias para su práctica. Fue un ambiente intenso y rápido. Fue difícil tratar a los pacientes sólo por un rato y luego no saber qué pasó con ellos cuando pasaban a otra parte del hospital. En una ocasión, no podía resistir darle seguimiento a un caso y buscó a una de las pacientes después de haberla admitido al hospital. Era una joven de 18 años con un bebé de sólo un año de edad. Llegó a la sala de emergencias con náusea y vómitos. Jenifer descubrió que los test de su sangre eran irregulares y salió que tenía leucemia. Cuando la fue a encontrar después, su mamá había llegado y las dos estaban llorando. Jenifer habló con ambas e intentó consolarlas. “Le dije que a veces uno no sabe por qué pasan las cosas, pero tenía que ser fuerte por su hijo. Muchos pacientes con leucemia sobreviven cuando pasan por quimioterapia, entonces tenía que seguir adelante. Empezó a motivar… es importante motivar a los pacientes, pero en cuanto a los pronósticos hay que ser real con ellos. Uno tiene que tratar de comprender cómo se sienten y tratar la manera de ayudarlos.” La paciente fue transferida a la Ciudad de Guatemala para quimioterapia pero ha permanecido en la mente y corazón de Jenifer.
Jenifer decidió ser doctora cuando se dió cuenta de que había una necesidad de tener doctores locales en Chajul. “Cuando llegaba al Centro de Salud, me llamaba mucho la atención cómo atienden a las personas y cómo saben qué medicamentos hay que darles, pero me dí cuenta de que no había nadie de Chajul. Eran médicos de otros lados,” explica. Nadie en el Centro de Salud podía hablar con los pacientes en su lengua materna y los jóvenes que soñaban en ser doctores no tenían nadie de su comunidad para tomar como ejemplo. Ahora los estudiantes iniciando sus carreras pueden mirar a Jenifer para saber cómo van a ser sus próximos años, pero Jenifer no sabía qué esperar cuando empezó. Si ella pudiera dar una capacitación de cualquier tema a estudiantes de primer año en su carrera o a estudiantes considerando la carrera, le gustaría dar una introducción a la carrera de medicina. Así ellos podrían conocer la carrera antes de tomar sus decisiones y sentirse más preparados de lo que Jenifer se sintió. “Explicaría qué significa llevar la carrera y por qué hay que llevarlo. Hay que tener paciencia porque cuesta estudiar y leer mucho. Tienes que sacrificar ciertas relaciones con amigos y familia, así que no debes llevarlo solo porque llama la atención o porque se puede ganar mucho dinero o porque no hay nadie que lo haya hecho antes. Como es una carrera muy humanista, no hay que perder esta esencia de que te vas a dedicar todo la vida a eso.” Jenifer esta entusiasmada con su carrera, y espera graduarse para que al fin pueda brindar cuidado médico a la gente de Chajul en su idioma materno y mostrarles que uno sí puede ser médico. Filantropis está orgulloso de poder apoyar a estudiantes que contribuyan tanto al futuro de Chajul.
Escrito por: Caitlin Mendenhall